LIJADORAS ABRASIVAS
Las lijadoras abrasivas son herramientas esenciales en numerosos campos, desde la carpintería y la metalurgia hasta la automoción y la construcción. Su función principal es desbastar, pulir o alisar superficies mediante la acción de un material abrasivo, como papel de lija, discos o bandas.
Existen diversos tipos, cada uno optimizado para tareas específicas:
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Lijadoras orbitales/roto-orbitales: Ideales para acabados finos y eliminación de pequeñas imperfecciones, ya que su movimiento aleatorio minimiza las marcas. Son muy versátiles.
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Lijadoras de banda: Potentes y rápidas, perfectas para remover grandes cantidades de material, nivelar superficies o dar forma a la madera.
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Lijadoras de palma (orbitales de 1/4 de hoja): Compactas y fáciles de manejar, excelentes para trabajos de detalle o en esquinas y espacios reducidos.
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Amoladoras/Esmeriladoras angulares: Aunque a menudo se usan con discos de corte, con los accesorios adecuados (discos de lija flap, por ejemplo) son muy eficaces para desbastar metal, eliminar óxido o preparar superficies grandes y resistentes.
La eficacia de una lijadora abrasiva depende no solo de la máquina en sí (potencia, ergonomía, sistema de extracción de polvo), sino también del tipo y grano del abrasivo utilizado, que debe elegirse en función del material y del acabado deseado. Son herramientas indispensables para lograr superficies lisas, preparadas para pintar, barnizar o ensamblar.